En un hecho pionero en España, un juzgado de Madrid ha condenado a una aseguradora a pagar 150,000 euros a la familia de un médico fallecido por COVID-19, aplicando la cobertura de su póliza de accidentes. El cirujano, contrató un seguro, y tras su muerte, la aseguradora inicialmente se negó a indemnizar a la familia. La sentencia destaca la inclusión de «inoculaciones infecciosas» en la póliza y reconoce el contagio como una «inoculación accidental», considerándolo un accidente cubierto. Nuestro despacho de abogados especializado respalda a profesionales en reclamaciones de indemnización por contagio de COVID-19 en el ámbito laboral.